Si eres un fanático de los cuentos de terror, te recomiendo entrar en cuentoscortos.org.mx sabrás que cada 31 de octubre, en el día de brujas y Halloween, los niños del pueblo evitaban visitar la casa de la colina, ya que los dueños siempre han sido atemorizantes y reservados. Solo se les ve de vez en cuando mientras están de compras en las tiendas del pueblo.
En este poblado, había dos jóvenes novios llamados Josh y Ana, que jugaban a como ellos decían "cazar fantasmas". Siempre tuvieron en mente visitar la casa de la colina, pero no se atrevían.
Hasta que un día, Ana junto valor y se dispuso a ir a la tal mentada casa mientras los dueños estaban de compras.
Al llegar a la casa, se coló por una de las ventanas que los dueños habían dejado abierta. La curiosidad la llevó a bajar las escaleras hasta llegar al sótano. Oyó que la puerta principal de la casa se abrió. Ana se escondió detrás de unas cajas vacías y alguien comenzó a bajar las escaleras hacia el sótano. Era una mujer, y sacó de la nevera una botella llena de sangre. Después de que la mujer se fue, Ana pudo salir y para asombro de ella se encontró con dos ataúdes con dos personas muertas recientemente.
Ella quedó en estado de shock, no podía creer lo que estaba viendo, camino con cuidado para encontrar alguna salida sin que la vieran.
Como todo estaba oscuro dejó caer sin querer una vaso al suelo. Por consiguiente, bajaron varios miembros de la familia y vieron a Ana, la agarraron y aunque gritó con todas su fuerzas, nunca más fue vista...
En este poblado, había dos jóvenes novios llamados Josh y Ana, que jugaban a como ellos decían "cazar fantasmas". Siempre tuvieron en mente visitar la casa de la colina, pero no se atrevían.
Hasta que un día, Ana junto valor y se dispuso a ir a la tal mentada casa mientras los dueños estaban de compras.
Al llegar a la casa, se coló por una de las ventanas que los dueños habían dejado abierta. La curiosidad la llevó a bajar las escaleras hasta llegar al sótano. Oyó que la puerta principal de la casa se abrió. Ana se escondió detrás de unas cajas vacías y alguien comenzó a bajar las escaleras hacia el sótano. Era una mujer, y sacó de la nevera una botella llena de sangre. Después de que la mujer se fue, Ana pudo salir y para asombro de ella se encontró con dos ataúdes con dos personas muertas recientemente.
Ella quedó en estado de shock, no podía creer lo que estaba viendo, camino con cuidado para encontrar alguna salida sin que la vieran.
Como todo estaba oscuro dejó caer sin querer una vaso al suelo. Por consiguiente, bajaron varios miembros de la familia y vieron a Ana, la agarraron y aunque gritó con todas su fuerzas, nunca más fue vista...